Fuentes de la Secretaría de Salud informaron que Coahuila continúa con un caso sospechoso de viruela del mono. Tras realizarse el aislamiento del paciente, se hizo un cerco sanitario de cuatro cuadras, en el sector donde vive, para descartar más casos.
Hasta el coste del lunes, solo se contaba con un caso sospechoso. Será el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (INRE) el encargado de realizar los estudios para confirmar o descartar el contagio.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha publicado un plan para detener los contagios.
En México, el boletín epidemiológico semanal, con corte del lunes, concentra un total de 55 casos confirmados, dos de ellos son mujeres. El mayor número de casos se concentran en la Ciudad de México con 33, seguido por Quintana Roo con siete, y Jalisco con tres casos.
El resto de estados son: Veracruz, Tlaxcala, Sinaloa, Puebla, Nuevo León, Morelos y México.
En contexto
La Secretaría de Salud federal indicó que, ante el incremento de casos de viruela símica en África, todas las unidades médicas de primer, segundo y tercer nivel de atención, Unidades de Vigilancia Epidemiológica Hospitalaria (UVEH), miembros de la Red Nacional de Laboratorios de Salud Pública (RNLSP), el Comité Nacional para la Vigilancia Epidemiológica (CONAVE), respecto al Mpox (Viruela símica), están atentas a la evolución de esta enfermedad en México.
Asimismo, informó que el Periodo de incubación es de cinco a 21 días. “La enfermedad sintomática cursa con dos periodos clínicos que, generalmente, se autolimita en dos a cuatro semanas”, se informó en el boletín epidemiológico de la semana 32.
Primeros cinco días: se caracteriza por fiebre, cefalea intensa, linfadenopatía, lumbalgia, mialgias y astenia.
Entre los días uno y tres después del inicio de la fiebre: aparecen las distintas fases del exantema que, por lo general, afecta primero la cara y posteriormente se extiende al resto del cuerpo.
Diagnóstico: se realiza por reacción en cadena de la polimerasa(PCR), en muestras de hisopado o exudado en seco, de las lesiones cutáneas (preferentemente el líquido de las vesículas o pústulas; alternativamente, las costras). No existe tratamiento específico y la vacuna específica para la enfermedad no está disponible ampliamente.