“Ni siquiera saben que están en el infierno”
Recuerdo el viaje a la ciudad de México de 1967 en compañía de mis padres en los autobuses Anáhuac y especial remembranza del premio que me era entregado en la estación de San Luis Potosí, en el restaurante de la familia Rodríguez Cepeda (Goyo y Magüe), consistente en dos chocolates Constanzo de los duendes, mismos … Leer más