No me mueve mi Dios para quererte. Fray Miguel de Guevara
No me mueve, mi Dios, para quererte el cielo que me tienes prometido, ni me mueve el infierno tan temido para dejar por eso de ofenderte. Tú me mueves, Señor, muéveme el verte clavado en una cruz y escarnecido, muéveme el ver tu cuerpo tan herido, muévenme tus afrentas y tu muerte. Muéveme, en fin, … Leer más