Excélsior. Salvador Díaz Mirón
Conservo de la injuria, no la ignominia; pero si la marca. ¡Sentíme sin honor, cegué de furia, y recogilo de sangrienta charca! Y hórrido amago suena… Así la racha en el desierto zumba, ¡cuando en crecientes vórtices de arena corre a ceñir al árabe la bumba! ¡Infames! Os agravia que un alma superior aliente y … Leer más