Vueltas de la vida
Antes, entrar a un banco embozado disparaba las alertas de la institución; ahora, no se permite el acceso si no se lleva cubierto el rostro. Antes, llegar a casa oliendo a alcohol generaba problemas con padres o cónyuges; ahora, es requisito para entrar. Antes, no saludar de mano era considerado una grosería; ahora, hacerlo se … Leer más