Por hostigamiento y abuso laboral, desabasto y cambios de medicamento en detrimento a la salud y la vida del paciente e incluso, hasta por prohibir entregar recetas manuales y bloquear los recetarios, trabajadores de la clínica 73 del IMSS se manifestaron la mañana de este martes para exigir la destitución de la directora Elizabeth Balderas y la administradora Elsa Martínez.
Además señalaron que bajo las actuales condiciones, es impensable la federalización de los servicios de salud.
Con mantas que fueron colocadas desde las 7:00 la mañana, los trabajadores señalaron que trabajaran bajo protesta y denunciaron la situación que enfrentan desde hace varios meses, por lo que buscan ser escuchados desde el nivel central del IMSS.
“Es hostigamiento laboral y a la directora ya la habían cambiado por la misma razón de la Clínica 82; hubo una junta hace unos 15 días con el sindicato porque queremos que la destituyan y ya pasaron los días y no hay solución”, dijo uno de los enfermeros.
Sin dar a conocer su nombre por temor a que las represalias se intensifiquen, los trabajadores manifestaron que esperan una respuesta por parte de las autoridades laborales pues recientemente el encargado de conflictos acudió a conocer la situación pero tampoco se ha resuelto nada.
Denunciaron que los trabajadores afectados son de todas las categorías desde enfermeros, asistentes médicos y médicos y van desde el maltrato, malas palabras, prepotencia, gritos e incluso no se les autoriza los pases de salida.
Dieron a conocer que en lugar de adquirir medicamento para los pacientes, prefirieron colocar cámaras para vigilar a los trabajadores; en el área de urgencias hace más de un año que no se cuenta con el servicio de electro.
“A los derechohabientes no se les otorgan los necesario, agreden verbalmente a los trabajadores, porque les dicen que vayan por medicamento en 15 días y no hay, no hay y no hay; mientras las administradoras se encuentran hostigando al personal en lugar de realizar sus funciones”, dijo un trabajador.
Las citas se pueden agendar hasta dentro de cuatro o cinco meses y es la misma situación en Rayos X,
Todo esto repercute con nosotros porque el trabajador viene con nosotros y nos ofenden cuando es un tema de la delegación.
Con el medicamento que se receta por una especialidad, se recomienda alguno especial, pero luego la administración pide que se les cambie por otro, por ejemplo en el caso de un cardiólogo aún cuando él le dice que no se puede, porque le afectará al paciente; la respuesta es que se lo tiene que dar.
Aunque los trabajadores consideran que después de esta manifestación recibirán represalias, se dicen desesperados por ser escuchados.