Marco Polo Valdés Ramos, primo de los pollos, Leopoldo Lara Escalante y Luis Ramos Escalante, es el abogado que desalojó la casa habitación de Armando Castilla Galindo, custodiado por decenas de Gates. Y lo paradójico es que la propiedad estaba a nombre del fallecido Gustavo Lara Ramos, tío del pollo mayor; de la famosa “Perica”, que fue quien le consiguió su Notaria a Lara Escalante. Por cierto, desalojaron en un “auto legalmente maravilloso” (fraguado y operado desde Palacio Rosa), a un fallecido. Todo, al unísono de una andanada contra el periódico Vanguardia. En varios actos de una misma obra, pero de dos Moreira. ¿No era Leopoldo Lara Escalante (a instancias de su padrino y tío Gustavo Lara Ramos, el asesor jurídico de Vanguardia y “del Gordo Castilla”, por años?
Con la novedad que al irse construyendo el escenario para una o varias candidaturas independientes, por la gubernatura y alcaldías, el gobernador ordena a sus empleados en el Congreso, alistar candados. Lo único seguro en este despropósito de administración son “las ocurrencias del mandatario”, a según el humor y al tenor de la coyuntura. El cortoplacismo es su bandera y el miedo, su motor.
La falta de dinero por la enorme deuda saca lo peor de este gobierno antisocial. Los decomisos no respetaron el día de la madre, dándoles en la ídem a los propietarios de vehículos con placas de otra entidad, o con láminas viejas o ante la falta de alguna placa. Pobres o desempleados, no hay distingo, se requisan carros sin piedad alguna. La tenencia que se prometió quitar, con desvergüenza tipo Moreira (firmada ante Notario) permitiría pagar los caros refrendos y las recurrentes renovaciones de laminados. Despilfarran en bandas y grupos musicales para marear al jodido pueblo, en vez de bajar impuestos y pagar programas sociales.
No inicia siquiera la licitación para las obras del Metrobus en Torreón y ya el alcalde Miguel Riquelme saca sus frustraciones (por tener al gobernador de damo de compañía toda la semana) y se pelea con su homólogo de Lerdo, por el transporte. Le amenaza con no dejar pasar al transporte de Durango una vez que esté en funcionamiento el nuevo transporte metro. Que falta de sensibilidad de Riquelme, enseña su nula vocación de gobernante. ¿Y así quieren ser?
El plantón de maestros inconformes no se acaba, sigue y continúa firme en sus sentidas demandas sociales. Alguien asaltó al Magisterio y ahora lo quiere contentar con migajas. Los maestros no están solos, quien así lo crea no entiende nada. Las cosas no se van a arreglar solas, hay asuntos que el tempo descompone. La calentura prelectoral apenas empieza y la contaminación de temas irresueltos es irremediable. Por más puro que sea un movimiento, siempre habrá quien lleva agua a su molino.
Que sigan gastando en ángeles azules y en tracalosas, que al cabo el pueblo quiere pan y circo. ¡Sigan creyendo que Coahuila duerme! Y como dijera en una ocasión, el literato español, Camilo José Cela, al ser acusado desde el micrófono de tribuna, de dormir en una sesión del Senado de su país, (cuando dormitaba durante una perorata interminable): “no es igual estar dormido que estar durmiendo, como no es lo mismo estar jodido, que estar jodiendo…
La Ruta de la Deuda”… muy pronto.
COLUMNAS de MÉXICO… “Con ética y honestidad: Otra historia se escribe. Otro México se cuenta.
4.5