La sobreabundancia de plásticos en México es un gran problema del que se tiene insuficiente información. En 2019 comenzó a legislarse en contra del uso de los plásticos de un solo uso, las bolsas de la industria de alimentos y bebidas, y los popotes de plástico, expedidas en los supermercados y tiendas en general, el boom alcanzó rápido a 28 estados, entre ellos Coahuila, pero la euforia se detuvo, prácticamente desapareció o sigue a ritmo muy lento, ya imperceptible.
El exceso del plástico nos coloca ante un futuro inundado por estos productos con gravísimos efectos en el medio ambiente ya que dentro de 30 años los océanos contendrán más plásticos que peces (Informe, Fundación Heinrich Böll), los empaques y envolturas de un solo uso son el mayor problema, 8 millones de plásticos entran en los océanos cada año, señala el Atlas del plástico.
Es necesario acceder al cambio y dejar atrás el “úsese y tírese”; las industrias de alimentos y bebidas ultraprocesadas que más generan contaminación por plástico y también responsables de las epidemias globales de obesidad y diabetes son, la Coca-Cola, Nestlé y PepsiCo.
Reciclar no es suficiente pues esa actividad apenas cubre un 9 por ciento de los deshechos plásticos (Greenpeace) por ello lo más importante es reducir lo más posible la producción plástica, pero esto no se logrará sin leyes precisas y la intervención seria y segura del Estado; por ello solicitamos a la Cámara de senadores que reforme la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos (LGPGIR), que prohíba los plásticos de un solo uso y haga responsables a las marcas de los productos desechables, envases, empaques y embalajes que utilizan y contaminan nuestros océanos.
Es generalizada la mentalidad de que colmar de plásticos la basura no tiene consecuencias para nuestro hábitat, nada más erróneo, el planeta está herido y va muriendo, porque la mayor parte de los deshechos plásticos van a los océanos, ahí se han encontrado peces con un 45 por ciento de residuos plásticos en sus organismos y más de 100 mil animales marinos mueren cada año, además, lo que desechamos en plásticos luego lo ingerimos, pasa al sistema sanguíneo y surge el cáncer y otros males orgánicos.
Nuestros océanos se ahogan en plástico y necesitamos tomar medidas que nos ayuden no solo a encontrar alternativas de compra y consumo, sino a cambiar nuestra manera de vivir sin plásticos, no podemos limitarnos a ser meros espectadores y dejarles a las nuevas generaciones un planeta contaminado de plástico por los siglos de los siglos, ya que esos productos para desaparecer requieren cientos de años.
Por todo lo anterior, es importantísimo que el candidato a alcaldía de Saltillo Armando Guadiana haya incluido en su programa de gobierno el cuidado al medio ambiente y a los recursos naturales. Sí se puede realizar acciones. Muy poco se sabe y menos se difunde sobre el gran problema de la sobreabundancia de plásticos en México.
El mejor desecho es el que no se produce y tú tienes hoy la oportunidad de hacer el cambio. Pídele al Senado mexicano que reforme la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos (LGPGIR), que prohíba los plásticos de un solo uso y haga responsable a las marcas de los productos desechables, envases, empaques y embalajes que utilizan y contaminan nuestros océanos.
Más de 250,000 personas ya se sumaron a la petición global para exigir a las marcas reducción en su producción de plásticos, pero las corporaciones siguen aprovechando la falta de regulación que existe en nuestro país. ¡Hagamos juntos un cambio mayor! Súmate y desplastifiquemos México.