¡Viva la vida. Viva Coahuila!

La aviesa “legalización al aborto en Coahuila”, contenida oculta, en las letras palaciegas del proyecto de ley del nuevo Código Penal, que Rubén Moreira envió la semana pasada al congreso, fue desechada. 

A saber, qué otros temas importantes contiene “el texto Moreira” del nuevo Código, (y que goles pretenden meter con esa afectación a la regla penal, a 33 días de que se acabe la administración del mal). Pero, por ahora, ha ganado Coahuila. No habrá aborto gobiernista.

Muchas organizaciones de la sociedad civil y religiosa, se han manifestado en los últimos días, a favor de la vida y en contra del aborto. Desde que se conoció la amenaza velada del albazo del gobierno, la gente se enfureció.

¿A quién consultaron, cómo consultaron, preguntó el público indignado? A nadie se preguntó, respondieron. Nunca se pregunta, remataron.

Vertical, brusco, imperativo llegó el proyecto de ley, al dócil congreso de Moreira.

“La forma es fondo”.

“La forma es fondo, dicen que dijo el maestro Jesús Reyes Heroles.

El gobierno de Coahuila en estos seis años se ha caracterizado, entre otras linduras, por cocer leyes al vapor, a modo y sobre todo, sin consultar a nadie (a pura ocurrencia del mandatario). Muchas leyes son las inventadas, y muchas las enmiendas a otras muchas que ya existían. Ahora hay tantas leyes joditivas y protectoras, que nadie tiene idea de su alcance real.

La constante es no consultar a los grupos sociales afectados con el alcance de éstas. Toda reforma y ley de alto impacto social, debe obligadamente ser consultada (suficiente y bastante) con la sociedad. El concurso de expertos en temas específicos es relevante. “Invitar” a los grupos afectados y contrarios, a opinar y discutir, a argumentar a favor o en contra, del tema sujeto de una ley o reforma, es necesario. Es este, jurídicamente un derecho, pero es prácticamente una utopía.

Sin truco.

La gente sabe bien quienes son las oficinas, universidades o conglomerados afines al gobierno (inclusive cámaras u organismos empresariales y Ongs, sometidos y entregados), de manera que no debe ser burdo el encargar del gobierno, de “hacer las consultas adecuadas”, a órganos parciales.

La transparencia es vital en toda consulta ciudadana.

Anti Sociedad y anti Familia. 

¿Por qué este gobierno dedicó leyes y reformas legales a temas que directamente afectan a la sociedad y a la familia, que dividen en lugar de unir, que fragmentan en vez de consolidar?

¿Por qué se llamó “Ley de La Familia”: a los matrimonios homosexuales, a las adopciones por homosexuales, a la pensión obligatoria a las concubinas (que quita el dinero a la esposa y a los hijos legítimos), a la renta de vientres y a la derrocada legalización del aborto?

Parece una intención directa el enfrentar y debilitar a la sociedad y el acabar con la familia tradicional de Saltillo y de Coahuila. Es monstruoso pensar en una mente retorcida y criminal, ideara esta intriga mayor. Perversa llamaría yo a esa intención consumada.

¿Debilitar para controlar, dañar el tejido social por rencillas de clase, pulverizar la  cohesión social para control político?

Ganó la vida. 

“Haiga sido como haiga sido”, ganó la vida.

Los inocentes, los que no pueden defenderse al ser nonatos, esos niños vivos en los vientre fecundados de su madres (pero no nacidos), han vivido. Vivirán para contarlo. El primer derecho humano, es el derecho a la vida.

Coahuila es tierra de vida, es tierra de nobleza… y nobleza obliga.

¡Viva la vida. Viva Coahuila!

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