La candidata a la presidencia de México Xóchitl Gálvez afirmó este lunes durante su visita a España que no tiene intención de “exigir disculpas” al país por un “pasado distante que no se puede cambiar” y recalcó que ve a ambos países como “naciones hermanas” que, “sin lugar a duda”, volverán a “construir juntos”.
Gálvez Ruiz, que se presenta por la coalición opositora Fuerza y Corazón por México de la que forman parte formaciones como Partido de Acción Nacional (PAN), el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD), recalcó que viajo a España a “proponer” y defender una “visión de presente”.
Sus palabras han tenido lugar durante un almuerzo celebrado en Madrid por el Consejo Empresarial Alianza por Iberoamérica (CEAPI) y, con ellas, Gálvez busca tender la mano al Gobierno después de que el actual presidente, Andrés Manuel López Obrador, pidiera una “pausa” en el marco de las relaciones entre los dos países al considerar que las empresas españolas han “abusado” del pueblo mexicano.
“En la agenda internacional, una de las prioridades será reconstruir la amistad y la confianza con el pueblo y el Gobierno de España“, ha afirmado antes de manifestar que “España, como principal socio comercial en Europa, es una fuente importante de inversiones, oportunidades y empleo. Conmigo no habrá ni pausas ni agravios”, expresó.
Señaló que “debemos defender el futuro que podemos construir”. “Durante los últimos cinco años, México ha estado gobernado por un presidente profundamente enamorado del timbre de su propia voz”, dijo antes de acusar a AMLO de dedicar varias horas al día a pronunciar un “monólogo disfrazado de conferencia de prensa”.
En este sentido, alertó de que las instituciones son para López Obrador un “estorbo incómodo” dado que quiere “preservar su poder e influencia más allá de los plazos que establece la Constitución”. “La Constitución es precisamente otro obstáculo para quien busca refundar la nación de un solo hombre. Por eso, la semana pasada López Obrador presentó una serie de reformas constitucionales que, entre otras cosas, buscan destituir a todos los miembros actuales de la Suprema Corte y elegir a sus nuevos integrantes por medio de sufragio popular”.
Esto, en palabras de Gálvez, refleja una “añoranza por el viejo régimen”. “Las reformas que atentan contra la democracia y la división de poderes no van a ser aprobadas porque ellos no cuentan con los votos suficientes”, recalcó.
Asimismo, lamentó las últimas imágenes de violencia registradas en México y manifestó que se trata de un “vídeo brutal de cómo la impunidad refleja lo que está pasando en México”. “Cualquiera puede traer un arma, cualquiera puede matar a un joven con absoluta sangre fría” dijo.
“Durante el mandato de López Obrador, los problemas que ya existían, como la corrupción, se han hecho más grandes. Las cosas que sí funcionaban, las convirtió en grandes problemas, como el tema de la salud. México estaba en camino de convertirse en una potencia global de energías renovables. (…) Con ese gobierno, México volvió a abrazar el uso de combustibles fósiles para la generación eléctrica”, sentenció.